Ahora que hemos analizado los tres vehículos de inversión o activos en los cuales puedes invertir tu dinero para incrementar tu patrimonio o capital voy a hablar de un tema que ha surgido como inquietud en algunos de los lectores, y que lo han expresado tanto en algunos comentarios como a través de correo electrónico. Muchas personas me preguntan si vale la pena invertir una parte o la totalidad de su capital en un fondo mutuo o fondo de cobertura, y en éste artículo compartiré contigo mi opinión sobre éste instrumento financiero, basado en experiencias propias.
En primer lugar, conviene definir que un fondo mutuo es un fondo común de inversión, creado por alguna entidad financiera, la cual reúne fondos de diferentes inversionistas, y que se encarga de realizar inversiones en su nombre, en diferentes instrumentos financieros, como pueden ser bonos, acciones, futuros, divisas, etc.
Existen una cantidad enorme de opciones de éste tipo de fondos, aunque en general, todos se venden con alguno o todos los siguientes argumentos:
- Es una inversión diversificada, pues colocan tu capital en diferentes instrumentos financieros
- Probablemente tu no tienes el conocimiento suficiente para realizar éste tipo de inversiones, y no quieres arriesgar tu capítal en algo que no conoces
- Seguramente tú no tienes tiempo de realizar las inversiones, así que deja que lo haga alguien por tí
- Puedes invertir pequeñas cantidades de dinero
- En el largo plazo, éste tipo de fondos han logrado retornos de hasta un 15% en promedio
Lo que hace la empresa emisora es que divide en el capital en “cuotas”, de un valor determinado, por ejemplo US$50 y las vende a inversionistas. Por ejemplo un fondo con un capital de US$200 Millones, podría tener 4 millones de “cuotas”, de US$50 cada una. Si tu decides invertir US$2,000 en dicho fondo, comprarías 40 cuotas de US$50, y tendrías un 0.001% del total del fondo.
La empresa administradora del fondo cobra una comisión por el manejo del mismo, que puede rondar el 2.25% anual sobre el capital total del fondo, o bien un 18% sobre la rentabilidad del mismo.
Pongamos de nuevo el ejemplo del fondo de US$200 Millones, asumamos que cobra el 2.25% sobre el capital total, recibe ingresos anuales de US$4.5 Millones, de los cuales tu estarás aportando $45 al año, es decir, $3.75 mensuales. Un punto importante es que la empresa administradora del fondo cobra su comisión, ya sea que tu obtengas ganancias, o pérdidas.
Ahora te comentaré mi experiencia particular. En diciembre de 2007 decidí invertir una parte de mi patrimonio en un fondo mutuo, que en los años anteriores había tenido retornos del 15% anual, y en el cual mi capital estaba “asegurado” (aunque hoy en día dudo de ésta seguridad). El vencimiento del fondo es en el año 2020, y no puedo retirar el capital invertido antes del 2014 sin penalización.
Realicé ésta inversión pensando en la regla del 72: Si me ofrece un 15% de retorno anual, duplicaré mi capital cada 4.8 años, es decir, que en 2020, mi capital se habría duplicado casi 3 veces. Mi inversión original fue de €2,000, así que para el año 2020, esperaba que mi capital fuera un poco menor que €16,000. Digo esperaba porque hoy ya no espero nada. Realicé la inversión en euros pues estaba en ese momento negociando un bien inmueble en dólares (del cual te hablaré en otro artículo), y quise “diversificar” mis inversiones. Asumí el costo del diferencial cambiario con tal de lograr ese objetivo de diversificación, y pensando que el euro sería una moneda mucho más fuerte en el mediano y largo plazo.
Los primeros meses el fondo constantemente iba subiendo, al punto que en julio de 2008 iba por €2,260. Un ROI del 19.5%, así que yo estaba más que felíz por la excelente inversión que había realizado.
Sin embargo, la alegría no duraría por mucho tiempo. Comenzó a disminuir mi capital, llegando a su punto más bajo, en 2009, hasta casi €1,750. Quiero decir que en medio de la crisis financiera, y los resultados que mostraron otros fondos y otros instrumentos financieros, el resultado de mi inversión no fue tan catastrófica.
Como podrás imaginar, a pesar que mi fondo se había reducido en un año más de €250 (según mi inversión original), el administrador del fondo siguió cobrando su comisión, así que aunque haya perdido un 12.5% del capital de los inversionistas que confiamos nuestro dinero al fondo, el negocio de él se mantuvo a flote. Asumamos que el fondo en total era de €200 Millones, él cobró en un año €4.5 Millones, aunque perdió €25 Millones de los inversionistas.
En 2010 la tendencia ha sido la recuperación, así que al mes de julio, mi fondo está en €2,009, una ganancia de €9 en casi 3 años, que representa un ROI de 0.15% anual. Es decir, NADA.
Algunas personas podrían justificar la situación, o tratar de engañarse pensando cosas como:
- Por lo menos no he perdido mi capital
- Al menos “algo” de ganancia he obtenido
- De todas formas no hubiera hecho nada más con ese capital
- Menos mal que lo están invirtiendo esos “expertos”, porque si lo invirtiera yo, quien sabe cómo estaría...
Sin embargo, ese no es mi caso, A mi me molesta no poder hacer nada para revertir la situación. Podrías pensar que soy exagerado, pero los datos que he compartido contigo no son todo, pues no he considerado todos los factores:
Factor de costo de tipo de cambio:
Cuando realicé mi inversión, tuve que comprar los euros, a partir de mis Quetzalez (moneda guatemalteca). Así que para ingresar tuve que invertir Q23,000, para comprar US$3,000, y luego con esos dólares comprar los €2,000. Como podrás imaginar, en el proceso de compra de divisas fue perdí el diferencial entre la tasa activa y pasiva que cobra el banco por éste tipo de transacciones. En ese momento pensé que dicho diferencial sería rápidamente compensado por las ganancias que obtendría. Supongamos que no hubiera realizado de la inversión, y hubiera querido mis quetzalez de vuelta, habría obtenido aproximadamente Q21,000. Eso representa una pérdida de capital de Q2,000, o aproximadamente US$260.
El tipo de cambio es una variable externa, y no puedo hacer nada para cambiarla. Hoy en día, con el tipo de cambio como está, mi capital en moneda local es Q20,100. Esto es porque el euro no resultó ser tan fuerte como pensé en su momento, los compré cuando estaba en pleno apogeo, aproximadamente a US$1.50 por €1, y hoy en día está a US$1.30 por €1.
Es decir, por tipo de cambio, he perdido Q2,900, o US$360 en los últimos 3 años. Obviamente éste es un factor que escapa del control de los administradores del fondo, pero para mi sigue siendo una pérdida.
Factor de inflación:
Como bien sabes, tu dinero pierde poder adquisitivo con el tiempo, por el efecto de la inflación. Según información del Banco de Guatemala, la inflación en 2008 fue un 9.40%, en 2009 fue -0.28%, y el acumulado en 2010 es de aproximadamente un 3%. En total, la inflación acumulada en éste tiempo ha sido 12%.
Así, los Q20,100 que tengo hoy en día, representan Q17,950 de los que tenía hace 3 años. Es decir, he perdido Q2,150, o US$270 por factor de inflación. Estoy clarísimo que éste factor escapa del control de los administradores del fondo.
Factor de costo de oportunidad:
Por último, no puedo dejar de lado el costo de oportunidad del capital original. Los Q23,000 los tenía invertidos en un fondo de pensiones, en un banco local, que me paga el 7% anual. Asumiendo que hubiera dejado el dinero en dicho fondo, se hubieran convertido en Q28,200.
Resumen de la inversión:
Si no hubiera realizado la inversión, hoy tendría Q28,200 en mi fondo de pensiones. Mi inversión hoy en día equivale a Q20,100, si desprecio el factor de inflación. La pérdida total que he tenido fruto de esa inversión es de Q8,100, o un poco más de US$1,000. Esto equivale al 35% de la inversión original.
En resumen, si mi situación financiera dependiera únicamente de esa inversión, hoy sería más pobre que hace 3 años. Gracias a Dios no dependo de ella, y he logrado progresos económicos que he compartido en otros artículos con los lectores de Instructor Financiero.
Éste artículo me ha servido para descargar la desilusión de haber realizado ésta inversión, pero quiero decir que no culpo ni al administrador del fondo, ni al intermediario con quien realicé la inversión., de los resultados que he obtenido. Ellos han jugado su papel, y yo tomé el riesgo de realizar la inversión. De todas formas, si algo bueno he obtenido de ésta situación es la certeza de que nadie va a cuidar mi patrimonio como yo puedo hacerlo.
Como conclusión obvia, yo NO recomiendo bajo ningún punto de vista la inversión en fondos mutuos, fondos de cobertura, fondo común de inversión, o cualquier otro nombre que tenga. Si quieres realizar inversiones bursátiles, te recomiendo que aprendas como hacerlo tú directamente, busca un curso, un libro, un blog, y sigue pendiente de Instructor Financiero, porque proximamente compartiré contigo algunas ideas de cómo invertir en la bolsa de valores.
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