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miércoles, 16 de diciembre de 2009

Algunas reflexiones ahora que termina el año


La razón principal que me motivó a iniciar Instructor Financiero fue ayudar a otras personas a mejorar su situación económica, mediante la utilización de herramientas sencillas, que yo he utilizado desde hace varios años, y que me han funcionado. En base a lo que he visto, a cada quien le funcionan diferentes estrategias y herramientas, y éste es un espacio donde cada quien puede compartir las experiencias que ha tenido.

Uno de los principales obstáculos para mejorar la situación financiera es la mentalidad. Ésta semana leí un artículo muy interesante que aborda éste tema desde una perspectiva muy particular, en Blog y Lana. El artículo se llama “Tengo dinero y me siento mal”, trata específicamente el caso mexicano, aunque yo me sentí plenamente identificado, y estoy seguro que la mayoría de latinoamericanos también lo estarían.

Quiero compartirte una frase que leí hace un tiempo, y me gustó mucho. Es de Jean Jacques Rousseau, quien dijo: “Es muy difícil pensar noblemente cuando no se piensa más que en ganarse la vida”. Y así justifico la búsqueda de una mejor posición financiera. Si quiero ayudar más a mis semejantes, si quiero ser mejor como persona y si quiero mejorar mi vida en general, necesito alcanzar la libertad financiera, que evite que mi principal preocupación sea llevar el pan cada día a mi casa.

En el artículo de Blog y Lana que recomendé más arriba, alguien comentó que asistió a un curso sobre “Los Secretos de la Mente Millonaria” (el otro año escribiré un artículo sobre éste buen libro), y que le sorprendió que hicieran mucha referencia a pasajes de la Biblia. También leí en un periódico local un artículo que trataba éste tema. Y es importante porque existe mucha gente que piensa que tener dinero es algo malo, y llega a pensar que es pecado y que ofende a Dios. Creo que es necesario romper ese paradigma, y sólo mencionaré algunas de las personas que aparecen en la Biblia y que gozaban de una situación económica bastante favorable, todas cercanas a Dios: Abraham, Isaac, Jacob, el Rey Salomón, Job y José.

Para comprender la importancia de la Educación Financiera, leí un artículo que se llama “De la riqueza a la pobreza”, y que trata de un ex-basquetbolista de la NBA, Antoine Walker, quien jugó 12 años para los Celtics de Boston, en los cuales se calcula que ganó $110 millones, aparte de unos $60 millones en contratos publicitarios. El artículo menciona que varias instituciones financieras lo están persiguiendo por no pagar varios créditos millonarios, además de enfrentar cargos por fraude en Las Vegas. Sin duda, mayores ingresos no garantizan la libertad financiera.

Recientemente leí en un periódico local unas noticias sobre los resultados financieros de los bancos guatemaltecos en éste año. La primera decía que las empresas emisoras de tarjetas de crédito habían tenido en el año una rentabilidad del 32% (Utilidad sobre Patrimonio). La otra noticia mencionaba que los bancos tuvieron en los primeros meses del año un retorno sobre el patrimonio del 15.5%. ¡NADA MAL PARA UN AÑO DE CRISIS MUNDIAL! Paralelamente, el 11% de la cartera de créditos bancarios está en mora, lo que representa un crecimiento del 27% con respecto a 2008. Mi conclusión es que todos hemos sentido la crisis en mayor o menor medida. Es notable que un buen porcentaje de la gente que tiene algún crédito bancario la está pasando mal, pero los bancos han incrementado sus ganancias con respecto al año anterior. No me malinterpretes. En general, pienso que el endeudamiento es una herramienta excelente que permite el apalancamiento, pero hay que saber utilizarla.

Por último, te quería recomendar un artículo que se llama “¿Te vas de compras? Lee ésto”. Menciona algunas estadísticas interesantes sobre los hábitos de consumo de los estadounidenses en éstas fechas, como por ejemplo, que cada persona se gastará en promedio $832, de los cuales el 75% será en regalos, y que el 42% de éstos regalos serán juguetes. La reflexión que hacía el autor es que una opción que casi nadie considera es la regalar AHORRO. Me pareció muy interesante su punto de vista.

Espero que éste año que concluye hayas obtenido todas tus metas y objetivos, que hayas cosechado muchos éxitos, y sobre todo, que hayas sido felíz. También espero que el próximo año te traiga muchas bendiciones, muchas oportunidades, muchos retos y también muchos éxitos. En el próximo artículo comenzaré a tratar el tema de plantearse metas, que considero fundamental para mejorar en todos los aspectos de la vida, y ahora que finaliza un año y vamos a iniciar uno nuevo, es el momento preciso para hacerlo.


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miércoles, 9 de diciembre de 2009

Ejemplo de Cómo Salir de Deudas II

En el artículo anterior planteamos la situación de una persona que está en un nivel de endeudamiento bastante difícil. Como dijimos en su momento, ésta es una persona ficticia, pero los datos podrían ser verdaderos.

Como vimos en otro artículo, para salir de deudas, lo primero que debe hacer ésta persona es informar a su núcleo familiar sobre la situación, pues es un problema que involucra a todos, y todos deben participar en la solución. Segundo, deberá hacer un presupuesto. Si aún no le alcanza, deberá hacer recortes drásticos en sus gastos, que pueden incluir la venta de la T.V., del automóvil, de la casa, o cualquier otra. Podría buscar nuevas fuentes de ingreso o renegociar la deuda.

Vamos a asumir que la persona decide recortar sus gastos, y logra pagar las cuotas mínimas sin necesidad de desprenderse de ninguno de los bienes que tiene. Lo primero que debería recomendarle a ésta persona es que se ajuste a su presupuesto, porque si no, probablemente caerá en una situación aún peor de la que se encuentra.

Vamos a evaluar algunas opciones que podría analizar para establecer el Plan para pagar las deudas:


Opción #1: Sacrificio Temporal de Flujo de Efectivo

Vamos a asumir que decide hacer los pagos mínimos, desde hoy hasta cancelar todas las deudas. Es a simple vista la opción más sencilla, no hay que pensar mucho, simplemente pagar la cuota, ir saliendo poco a poco de las deudas, y tratar de no volver a caer en lo mismo. La tabla de pagos quedaría así (si no puedes ver claramente la tabla, dale click y se abrirá en una nueva ventana):

Es fácil ver que la deuda de la clínica la pagará en 6 meses, por lo que a partir del séptimo mes, unicamente tendrá que pagar $1,102 de deuda, hasta el noveno mes, cuando pague la deuda de la T.V., y así ira bajando la deuda conforme pasa el tiempo. A partir del mes 52 sólo le quedará la deuda de la casa, que estará pagando $383. El último pago lo realizará en el mes 204, es decir, le quedan 17 años y 1 mes para salir de deudas.

En total terminará pagando $122,096.14, que es la suma de $68,300 de la deuda, y $53,796.14 de intereses.

Opción #2: Pago Mensual Constante – Efecto Bola de Nieve

Vamos a asumir que decide hacer los pagos mínimos al principio, y cuando comienza a cancelar una deuda, el monto de dicha deuda lo va a utilizar para pagar otras. Es decir, que va a mantener constante el pago mensual de $1,262, y a ésto se le llama efecto bola de nieve., y que recomienda Dave Ramsey en su libro "La Transformación Total de su Dinero". La tabla de pagos quedaría así:

En éste caso, vemos que al terminar de pagar la deuda de la clínica, esos $159 los utiliza para comenzar a pagar la T.V. Como primer punto, vemos que logra salir de la deuda de la clínica un mes antes que en la primera opción. Luego el monto de la clínica y de la T.V. lo utiliza para pagar la Tarjeta B. Al papá lo vamos dejando de último, pues asumimos que él está conforme con la forma de pago acordada, y no cobra intereses, como si lo hace la tarjeta de crédito.

El último pago lo realizará en el mes 62, haciendo pagos constantes de $1,262. Habrá cancelado todas sus deudas en 5 años y 2 meses. En total, con ésta opción, terminará pagando $95,421.30, los cuales incluyen la deuda de $68,300, más $27,121 de intereses.


Opción #3: Pago Mensual Constante – Efecto Bola de Nieve – Agregar $100 mensuales

En ésta opción, agregaremos $100 al pago mensual, quedando cuotas mensuales de $1,362.03, y siguiendo con el esquema de bola de nieve. La tabla funciona igual que en la opción #2, y queda de la siguiente manera:

Podemos determinar que el último pago lo realizará en el mes 58, haciendo pagos constantes de $1,362. Habrá cancelado todas sus deudas en 4 años y 9 meses. En total, con ésta opción, terminará pagando $93,912.22, los cuales incluyen la deuda de $68,300, más $25,612.22 de intereses.

A manera de resumen, te presento ésta tabla:

Espero que entre tanto número no te hayas perdido. Ha sido para mi un reto tratar de resumir ésta información en el menor espacio posible. El archivo de excel que me sirve de guía, tiene 15 hojas, y una cantidad de números que no consideré importante presentar en éste espacio.

Lo más importante es que entiendas que si tienes una deuda, y no haces nada por reducirla, terminarás pagando muchísimos intereses. Existen opciones para reducir ese pago, y deberás considerarlas todas, antes de tomar una decisión.

Esa decisión será tu plan de salir de deudas, y la idea es que te ajustes a ese plan. Espero que te haya servido, y de todas formas, éste tema no queda aquí, seguiremos abordándolo en futuros artículos.

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Salir de Deudas
Pago de Deudas
Ejemplo de Cómo Salir de Deudas I


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jueves, 3 de diciembre de 2009

Ejemplo de Cómo Salir de Deudas

En los artículos anteriores hemos tratado el tema de salir de deudas, reconociendo que es un punto esencial para cualquiera que quiera alcanzar la libertad financiera. En éste y los próximos artículos desarrollaré un pequeño ejemplo de cómo una persona puede salir de deudas. Todos los datos que se muestran en el siguiente ejemplo son datos ficticios, que no pertenecen a ninguna persona. Eso si, cualquier parecido con la realidad, es pura coincidencia.

A pesar que los datos son ficticios,
utilizaré tasas de interés que podrían ser las tasas reales, y las cuotas o pagos en todos los casos están calculados en base a dichas tasas de interés, de forma similar a cómo lo calcularía una institución financiera.

Vamos a establecer la situación de deudas en una tabla, y luego desglosaremos para que veas
cómo una persona puede llegar a ésta situación de endeudamiento, si no planifica sus finanzas personales. Para efectos prácticos todos los valores están expresados en dólares.


Ésta persona adquirió deudas a diferentes acreedores, por un monto total $68,300. Su situación de entrada parece delicada, aunque habrá que considerar que no sería lo mismo si tiene ingresos de $2,000 al mes, que si tiene $8,000. Para efectos prácticos vamos a hacer dejar por un lado los ingresos por el momento, para concentrarnos en las deudas:
  • La casa la compró con una hipoteca de $45,000, pagadera a 20 años, con una tasa de interés del 8.25%. Hasta el momento ha pagado 36 cuotas de $383.43 cada una. El saldo de la deuda es $41,986.85, y si continua tal y como va, terminará pagando $92,023.09
  • El automóvil lo compró pidiendo un préstamo por $12,500, a 5 años con una tasa de interés de 10.5%. Hasta el momento ha pagado 8 cuotas de $268.67, todavía debe $11,185.94, y si continúa sin ningún cambio, terminará pagando $16,120.43
  • Contrajo deudas en la tarjeta de crédito del banco A por $2,500. La tasa de interés es 3.5% mensual, que representa un 42% anual. El mes pasado, cuando reconoció que debía cambiar su situación, rompió ésta tarjeta de crédito, y quiere pagarla en un máximo de 3 años. Hizo cuentas que le quedan cuotas de $123.21, de los cuales hizo el primer pago el mes pasado. El saldo de la deuda es $2,464.29 y si continúa sin ningún cambio, terminará pagando $4,435.57
  • Tenía otra tarjeta de crédito del banco B, en la cual tenía un saldo de $3,200. La tasa de interés es 1.5% mensual, que representa un 18% anual. El mes pasado rompió ésta tarjeta de crédito, y quiere pagarla en un máximo de 3 años. Le quedan cuotas de $115.69, de los cuales hizo el primer pago el mes pasado. El saldo de la deuda es $3,132.31 y si continúa sin ningún cambio, terminará pagando $4,164.76
  • En un momento de desesperación, el mes pasado, pidió un préstamo a su papá por $1,800, quien le dijo que no le iba a cobrar intereses, y deberá cancelar la deuda en 2 años. El mes pasado hizo su primer pago por $75, y de cualquier forma terminará pagando $1,800
  • Hace 3 meses compró una T.V. de plasma, “en cómodas mensualidades”. La T.V. costaba $1,500, y el préstamo que adquirió fue a 12 meses, a una tasa de interés de 16%. Lleva pagadas 3 cuotas de $136.10, y si continúa así terminará pagando $1,633.16
  • Hace unos meses recibió una gran bendición, con el nacimiento de su primer hijo. Sin embargo, no se había logrado preparar económicamente para el gran día, así que para pagar el total de la cuenta de la clínica, solicitó un préstamo a 12 meses por $1,800, a una tasa de interés de 12%. Lleva pagadas 6 cuotas de $159.93, y si continúa así terminará pagando $1,919.13
A continuación te presento la tabla con los datos completos ( si no logras ver los datos, da click derecho y abre la imagen en una nueva pestaña):
Como primera conclusión, puedes darte cuenta que ha pagado más de $17 mil, y sin embargo, el saldo de la deuda apenas ha bajado en casi $6 mil. Verás otras conclusiones como ésta en el próximo artículo, en el cual analizaremos algunas estrategias que podría utilizar ésta persona para pagar la deuda, y las diferentes implicaciones que tendría cada una. Creo necesario decirte que todos éstos datos fueron calculados con fórmulas financieras, y no es posible extrapolarlo por regla de 3. Me explico, que no puedes modificar una variable y por regla de 3 calcular un nuevo dato, pues los resultados probablemente no serán correctos. Quizá en futuros artículos haremos un resumen de las fórmulas financieras y cómo utilizar en una hoja electrónica.   Artículos relacionados: Ejemplo de Cómo Salir de Deudas II Las Deudas Malas Endeudamiento  
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martes, 24 de noviembre de 2009

Salir de Deudas


Hemos estado tratando el tema del endeudamiento, que resulta importante e imprescindible para lograr la libertad financiera, por el simple hecho de que mientras debas dinero a alguien más, no sólo estás pagando intereses que son recursos que podrías utilizar en adquirir activos que te generen ingresos, sino que además mientras tengas una deuda, y sobre todo si has perdido el control de ella, lo más probable es que no te sientas LIBRE.

Existen algunas aspectos importantes a tomar en cuenta para analizar a fondo la situación. Por ejemplo, un banco te puede autorizar un crédito de hasta el 33% de tus ingresos. Obviamente, si estás endeudado por un 10% de tus ingresos, un banco te prestará hasta un 23% de los mismos. Si nos basaramos a ésta lógica, tu máximo endeudamiento sería un 33% de tus ingresos. Sin embargo, ésta misma lógica no siempre funciona, pues existen otras herramientas de endeudamiento que pueden hacer mucho más crítica la situación, como por ejemplo las tarjetas de crédito.

Asumamos por un momento que te encuentras en una situación “delicada” de endeudamiento. Puede ser que estás pagando tu casa, o tu vehículo, la T.V. de plasma, la emergencia que te surgió hace unos meses y para la cual no estabas preparado, las tarjetas de crédito están a tope, o... todas las anteriores.

Sin entrar en mayores detalles, la situación no “pinta” nada bien. Podríamos decir que tu nivel de endeudamiento es riesgoso, y eso se refleja en todas las facetas de tu vida: pérdida o ganancia de peso, falta de sueño, falta de energía para enfrentar cada día, enfermedades recurrentes, problemas familiares y/o conyugales, alejamiento de amistades, estrés constante, etc.

Aquí te doy algunas pistas de por donde debes empezar para remediar la situación:
  1. Toma la responsabilidad del caso, no niegues tu situación, no culpes a nadie más, no te estanques en autocríticas y lamentaciones: Dedídete a cambiar la situación, que sóla no lo hará
  2. Informa a tu núcleo familiar sobre tu situación: Las personas que viven contigo tienen el derecho y la obligación de saber lo que está pasando. Probablemente ellos han contribuído con su parte a que tu situación sea la que es hoy en día, así que también deben formar parte de la solución
  3. Deberás hacer lo que NO has hecho hasta el día de hoy: UN PRESUPUESTO. Si lo hubieras hecho, probablemente no habrías caído en la situación en la que estás. Irremediablemente tendrás que priorizar tus gastos y eliminar los que sean innecesarios. Además, tus ingresos deberán alcanzar para pagar las deudas, además de cubrir los gastos vitales que no podrás eliminar
  4. ¿Y qué pasa si no me alcanza? Pues tendrás que hacer recortes drásticos en tus gastos, llegando inclusive a vender el vehículo, la casa, la T.V., o cualquier otra cosa que estás pagando y que puedas prescindir de ella. Podrías buscar nuevas fuentes de ingreso, como otro trabajo, un negocio, etc. Podrías también declararte en bancarrota, o renegociar la deuda en el banco, aunque eso no es lo más aconsejable, pues seguramente tu record crediticio quedará dañado (más de lo que seguramente ya está)
En el siguiente artículo comenzaré a detallar una situación ficticia, pero realizada con datos reales, en la cual analizaremos varias opciones para pagar las deudas. Por el momento es importante que evalués tu situación de endeudamiento, y si no es tan crítica, de todas formas deberás tomar en cuenta los consejos para pagar las deudas, y evitar caer en una situación más delicada.

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miércoles, 18 de noviembre de 2009

Pago de Deudas


Hemos repasado los aspectos más importantes sobre el ahorro para el retiro. Ahora voy a ahondar un poco en el tema del pago de deudas, que he tratado en anteriores artículos. La importancia de éste tema es que si tienes un nivel de endeudamiento alto, tu situación financiera es delicada, en el mejor de los casos, y deberías concentrarte en pagar tus deudas para poder dedicarte por completo a construir tu patrimonio, aumentar tus ingresos pasivos, y encaminarte hacia la libertad financiera.

Para empezar, quisiera dejar claro que una deuda es un compromiso voluntario que tu adquiriste. Partimos de la base que nadie te obligó a endeudarte, y que tu eres el principal, si no único, responsable de que dicha deuda exista en primer lugar. Pienso que un punto muy importante es no eludir dicha responsabilidad, achacándosela al banco, a la tarjeta de crédito, a la sociedad de consumo, a tu conyugue, a tus hijos, o a nadie.

Existen ocasiones en que alguien puede decir que tuvo una emergencia que lo forzó a endeudarse, pero hemos visto que una parte muy importante del camino que estás recorriendo es formar tu fondo de emergencias, así que en teoría, ésta tampoco debiera ser tu justificación.

El siguiente punto importante es que existen deudas caras y deudas baratas. Un ejemplo de deuda cara es por ejemplo la tarjeta de crédito. Si tienes un saldo atrasado el día de la fecha de corte, te van a cobrar en el mejor de los casos un 18% de intereses, llegando en algunos casos a tasas del orden del 42% (Creo que en Europa y EEUU no llega a ser tan alta, pero al menos en Guatemala sí, y supongo que la situación es parecida en toda América Latina).

Existen deudas baratas, por ejemplo, algunos bancos ofrecen créditos llamados back to back, en los cuales la garantía son certificados de depósitos o fondos privados de pensión. Es decir, la garantía del banco es dinero que ya tienes depositado con ellos. La tasa neta en éstos casos puede llegar a ser tan baja como un 3%. Cuando digo tasa neta me refiero a la diferencia entre lo que pagas de interés por el dinero que te prestan y lo que te pagan por el dinero que tienes en garantía.

Existen otras deudas que pueden considerarse baratas, o incluso “gratis”, pero que al final resultan muy caras. Por ejemplo, si te presta dinero un amigo o un familiar. Puede ser que te cobre una tasa de interés bastante baja, o incluso no te cobre intereses. Mientras le pagues lo que acordaron, y él no necesite la plata, puede ser que todo marche sobre ruedas. Sin embargo, casos se han visto de separaciones familiares y amistades desechas por problemas de éste tipo. Y aunque pienses que no va a llegar la situación a ese extremo, no deja de ser incómodo. Por ejemplo, asumamos que le debes $200 a tu hermano, y le pagas mes a mes lo acordado, y de repente decides comprar un reloj de $300. Puede ser que tu hermano sienta que antes de adquirir ese reloj, debieras haber honrado tu deuda, y lo más triste del caso, es que tu hermano tendría razón.

Ahora la pregunta es, ¿Por qué nos endeudamos? La respuesta más probable a esa pregunta es: Porque quisimos darnos un nivel de vida que no es el que podíamos darnos. Y es triste, pero muchas veces quienes más nos influencian en éste sentido son nuestros familiares y amigos. La sociedad hoy en día nos empuja a consumir, y en algunos casos somos incapaces de controlar nuestras emociones. Por ejemplo, sale el nuevo teléfono celular, y sentimos que “tenemos” que tenerlo, y salimos a comprarlo, como que nuestra felicidad dependiera de ello. Todos tenemos nuestro “punto débil”, ese punto donde debemos luchar para no caer en la tentación de salir a gastar dinero que muchas veces no tenemos.

Puede haber algunos casos donde efectivamente surgió una emergencia para lo que no estábamos preparados, aunque en el futuro estaremos preparados (o trataremos de estarlo) para éstas eventualidades, con un fondo de emergencias. Más adelante analizaremos el caso de los seguros, para que mires que te puedes cubrir prácticamente de cualquier riesgo que tengas.

Por último, puede ser que te endeudes porque no tienes suficiente información sobre tus finanzas personales. Si manejas mes a mes tu presupuesto, mantienes al día tus estados financieros y controlas tu información con razones financieras, lo más probable es que sepas de antemano de cuánto dinero dispones para determinado gasto, y si puedes o no afrontarlo sin caer en endeudamiento.

Seguiremos analizando éste tema, pero será hasta la próxima.

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Ejemplo de cómo salir de deudas


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martes, 10 de noviembre de 2009

Los Ahorradores son Perdedores (Savers are Losers)

Ésto es lo que declara Robert Kiyosaki en un video en inglés, en su sitio oficial. Es, además, uno de los puntos principales que destaca en su nuevo libro “La Conspiración de los Ricos”. Su argumento es que las reglas del dinero cambiaron en 1971, cuando el presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, eliminó el patrón oro como respaldo para el dólar, convirtiéndolo en la divisa de reserva del mundo.

A partir de ese día, el respaldo del dólar ya no es oro, sino únicamente la confianza de los ciudadanos de los demás países del mundo en que los ciudadanos estadounidenses seguirán manteniendo el monstruo en el cual se ha convertido el gobierno de dicho país, con su déficit fiscal superior a $1.5 Billones, y aumentando.

El punto de Kiyosaki (y de muchos intelectuales muy respetados en EEUU y el mundo), es que las actuales crisis financieras que estamos sufriendo son debido a las acciones tomadas en 1971. Un aspecto en que se refleja ésto es la inflación, pues todos vemos que nuestro poder adquisitivo tiende a disminuir con el tiempo, pues los precios de las cosas se incrementan constantemente. Esto se debe al incremento en la masa monetaria circulante (acción provocada por los bancos centrales), lo que provoca un aumento generalizado en el nivel de precios. Mucha gente ha llegado a decir que la inflación es el impuesto más desgraciado de todos, pues es el principal generador de pobreza en un país, las personas pobres y de clase media no logran incrementar sus ingresos, al mismo tiempo que tienen que hacer recortes en su presupuesto para llegar a fin de mes, o lo que es peor, se endeudan para conseguirlo.

Kiyosaki dice que para ganar en el juego del dinero, tenemos que cambiar nuestra forma de pensar, pues las reglas de hoy en día son diferentes a las de hace 40 años.

Cualquier que haya leído mis artículos anteriores, sobre el plan de retiro y el ahorro para la jubilación, podría pensar que éstos conceptos de Kiyosaki riñen o descalifican todo lo que yo argumenté en ellos, y sin embargo, yo no pienso que eso sea así.

En primer lugar, es importantísimo que crees tu fondo de emergencia, pues éste evitará que caigas en deudas que no puedas afrontar, por imprevistos o accidentes que a cualquier persona le pueden suceder.

Con respecto al fondo para el retiro, o para tu jubilación, la situación se torna un poco más compleja. Si revisas la tabla que presenté en el artículo anterior, no contemplaba el efecto de la inflación. Si ajustamos los datos, con una tasa inflacionaria del 7% anual los porcentajes que deberías ahorrar son los siguientes:


Si lo ves, empieza a tomar sentido la frase que da el título a éste artículo. De verdad es triste pensar que una persona de 40 años de edad, tendría que ahorrar el 57% de sus ingresos para poder tener un buen retiro. Y no digamos que una persona de 50 años, ya casi es mejor que ni lo intente, pues para lograrlo deberá vivir con menos del 5% de sus ingresos, y ahorrar el resto.
Lo que yo te propongo es que comiences a ahorrar para tu retiro, si todavía no los haces. Si los has hecho por algunos años, y ya tienes algo ahorrado, entonces mi propuesta es que debes buscar opciones más rentables para invertir tu dinero. Es importante el ahorro, porque es difícil comenzar un negocio, invertir en bienes raíces, o en bolsa de valores, si no tienes “capital”. No digo que no se pueda, digo que sin duda será más complicado.
Parte de los objetivos de éste blog es que tú te decidas a buscar esas opciones de inversiones que te produzcan mejores rendimientos. Más adelante intentaremos ir descascarando más esas opciones, para que tu decidas cuál te conviene más. 


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jueves, 5 de noviembre de 2009

Más sobre los Fondos de Jubilación


La semana pasada comenzamos a abordar el tema del ahorro para el retiro, algunas de las razones que justifican hacer éste esfuerzo y sacrifico (que no podemos negar que eso es), y algunos requisitos previos, como tener un fondo de emergencias.

En resumen, podríamos decir que cualquier persona debiera tener entre sus prioridades guardar un poco para el retiro, para vivir una vejez tranquila, no ser una carga económica para otras personas (hijos, familiares, tributarios, etc), enfrentar los altos costos que seguramente tendrá el mantenimiento de la salud, y poder desarrollarse como persona.

Ahora surge la pregunta, ¿Cuánto debo ahorrar? La respuesta, como todo lo que tiene que ver con finanzas personales, es que depende. Depende de tu situación actual, depende de tu situación familiar, depende de tus sueños, de tus metas, depende de lo que quieras hoy y lo que quieras para el mañana.
Te voy a dar un ejemplo, que te puede dar una pauta de lo que puedes hacer. Supongamos que tienes 30 años, tienes ingresos por $2,000, quieres retirarte a los 65 años de edad, con los mismos ingresos que tienes hoy en día. Conste que muchos autores dicen que para hacer éste cálculo debes tomar un porcentaje de tus ingresos de hoy, asumiendo que tus gastos se van a reducir. Ésto puede ser cierto, pero yo prefiero pensar que podré gastar mi dinero en otras cosas mejores, ciertos lujos o gustos que quiera darme. Asumamos que tienes una opción para ahorrar con una tasa de interés del 7% (En Guatemala, un fondo de pensiones de un banco privado puede ofrecer esa rentabilidad, en moneda local).
Partiendo de esa información y haciendo los cálculos correspondientes, debieras de ahorrar un 9.7% de tus ingresos, es decir, $194 mensuales.

A continuación te muestro una tabla con los porcentajes de tu ingreso que deberás guardar, partiendo de la edad a la que comenzarás éste ahorro:


Para ser más claros, si tienes 40 años, y no tienes guardado ni un centavo, y quieres empezar hoy, deberás ahorrar un 21.1% de tus ingresos actuales, para poder gozar del retiro con los ingresos que tienes hoy en día. ¿Te imaginas lo que sería disfrutar del dinero que recibes mes a mes, sin hijos que mantener, sin casa que pagar (probablemente habrás terminado de pagar la hipoteca), y sin mayores gastos, más que tus necesidades básicas, tu salud y tus gustos?

Se han escrito varios artículos sobre el costo de no empezar a tiempo, y la tabla anterior lo muestra claramente. La situación se va tornando más y más crítica a medida que avanza el tiempo. Si tienes 50 años, y te dicen que debieras ahorrar el 53.1% de lo que ingresas al mes, tal vez te sientas totalmente desilusionado y al borde de un infarto. Te recomiendo que no saques conclusiones tan rápidas, pues hay mucha tela que cortar sobre éste tema.

Si no lo menciono en éste momento, puede ser que genere falsas expectativas, y pensarán que “se me olvidó” el tema de la inflación. No se me olvidó, pero simplemente no quise tratarlo en el artículo de hoy, sino que lo haré en el siguiente. El objetivo de hoy es motivar a que comiences hoy mismo a ahorrar para el futuro, sin importar la edad que tengas. Si sientes que ya no vale la pena, te recuerdo el dicho: “Más vale tarde, que nunca”. Verás que buscando podrás encontrar otras vías para lograr los mismos objetivos.

Y tú, ¿Tienes creado tu fondo de jubilación? ¿Te motivó el presente artículo a para crearlo hoy mismo?


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